Día uno

Coatepec

A sólo 15 minutos de Xalapa, se encuentra el Pueblo Mágico de Coatepec, conocido como la capital del café en México, nombrado pueblo mágico en 2006 por su encanto y misticismo.

Coatepec es un lugar donde se cosechan los mejores granos de café, con alta tradición y calidad en nuestro país. Además, posee una rica gastronomía y el café se encuentra en muchos de sus platillos. Te sorprenderán los increíbles paisajes de la región, la cultura que se respira en cada rincón y  las haciendas donde se cultiva y procesa ésta aromática semilla. Sus casonas del siglo XIX de fachadas con mosaicos decorados a mano, portones de madera y bonita herrería, así como muchos cafecitos, helados artesanales, licoreras, etc. hacen de Coatepec un encuentro con su pasado andaluz reflejado en su arquitectura y, al mismo tiempo, es el contacto con la humedad perfecta que hace posible el cultivo de esta exquisita bebida.

En el lugar, aprenderemos más sobre el mundo del grano del café en el Museo del Café (El Café-tal). En este sitio, conocerán acerca de las distintas etapas de este famoso grano, podrán caminar entre plantaciones de café y conocer todo sobre su cultivo, así como su procesamiento y, no podía faltar, la degustación de un delicioso café.

Xico

Al término de nuestra visita, seguiremos nuestra ruta hacia Xico, lugar contiguo a Coatepec y declarado Pueblo Mágico en 2011. Se trata de un alegre poblado que posee un clima templado y húmedo, se sitúa en las faldas del Cofre de Perote. Posee increíbles bellezas naturales (cañones y cascadas) y famosas haciendas cafetaleras. El clima de la región resulta extraordinario para la producción de café de altura, ya que oscila entre los 12 y 26 grados y gracias también a la humedad que proporciona la cascada. Aquí podrás disfrutar de su encanto colonial y de su exquisita gastronomía donde el mole y los licores son protagonistas.

Visitaremos la Cascada de Teocelo, que forma el río Texolo muy cerca de Xico. Al bajar los más de 300 “escalones” hechos de troncos nos podremos acercar a la caída principal de agua. Esto nos permitirá sumergirnos en los olores y sonidos del bosque tropical. Al término de esta actividad, nos dirigiremos a Xalapa. Alojamiento en Xalapa y noche libre.

Día dos

Xalapa – Jalcomulco (descenso en los ríos rápidos)

Después del desayuno en el hotel, salida rumbo a Jalcomulco, donde llevaremos a cabo nuestro rafting o descenso por el río pescados en balsas (salida opcional). En este lugar se vive una experiencia de aventura, adrenalina y diversión por sus actividades ecoturísticas, siendo la principal el descenso en balsas por el río rápido o “rafting”. El personal profesional nos dará todas las indicaciones y nos acompañará durante el recorrido. Al término de la actividad, regreso a Xalapa.

Tarde/noche libre. Alojamiento en Xalapa.

Día tres

Xalapa – Naolinco – Ciudad de México

Desayuno en el hotel. Después del check out conoceremos la capital del estado de Veracruz, Xalapa, con su clima tropical cálido, a veces con neblina, rodeada de montañas y reconocida por su riqueza natural. Visita de ciudad, una parte será a pie ya que en el centro de la ciudad no es posible transitar con el autobús. Traslado a Naolinco, visita guiada.

Al término de la visita de Xalapa, continuaremos hacia Naolinco. Su origen se remonta hasta antes de nuestra era, fue una población totonaca. El totonaco naolinqueño fue adorador del sol y la luna, poseían observatorios, lo que les valió el nombre de pueblo de cronólogos. Durante el siglo XVI hasta el año de 1519 durante el gobierno de Moctezuma Xocoyotzin, Naolinco permaneció sometido. Los ecosistemas que coexisten en el municipio son el de bosque caducifolia con árboles de encino, guácima, mora, joba y orejón, donde se desarrolla una fauna compuesta por poblaciones de tlacuaches, armadillos, zorrillos, conejos, mapaches y víboras.

En el lugar se pueden apreciar las construcciones coloniales pintadas en colores fuertes y alegres que en conjunto forman un arcoiris arquitectónico. Trabajos de talabartería fina, dando forma a calzado para dama y caballero, además, la fabricación de bolsas, chamarras, chalecos y botas. Máscaras de madera y relojes de mascaritas, personajes de la danza de Moros y Cristianos. Muebles de madera, herrería. El mole de especias; chiles verdes y secos, rellenos de carne en picadillo; embutidos y cáchalas de cerdo y cecina. Los dulces típicos son variados y originales, como el de coco, leche con limón, nuez, pasitas, rompope, vainilla, cacahuate, jamoncillo de pepita, calabaza, higos y postres con majar y coco con piña, camote, galletas, mazanas y polvorones, además de los exquisitos preparados de infusiones como son; vino de mora, de berenjena, guayaba, naranja, pericón, anís, uva, etc. También son típicos los embutidos, el mole, los chiles rellenos, toda clase de tamales, que tienen en Naolinco su toque especial.

La cascada espectacular de agua de aproximadamente de 80 m de altura, en donde se precipita el caudal del «El Órgano», el cual rodeado de abundante vegetación, hace más atractiva la estancia del visitante. El mirador de dos niveles, en donde se puede disfrutar de un bello paisaje conformado por la impresionante caída de agua y la sierra madre oriental (se podrá visitar sólo si ya se terminaron los trabajos de reconstrucción derivados del sismo del 2017). Cuenta con estacionamiento, restaurante, juegos infantiles y en la parte baja una explanada.